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Descubre las mejores técnicas de concentración de Novakid para mejorar en el estudio
Según las investigación, muchas familias encuentran difícil ayudar a sus hijos a estar atentos a la hora de hacer los deberes, estudiar o, en general, hacer cualquier cosa que no implique jugar.
El objetivo de este contenido es dar a los padres algunos tips que les ayude a solventar este problema. Para ello preguntamos a Julia Alekseeva, psicóloga, profesora con más de 8 años de experiencia y formadora de profesores en Novakid sobre las razones de un nivel bajo de concentración y los mejores consejos para conseguir aumentarla.
Concentración para estudiar: ¿cómo mejorar?
Es importante definir lo que consideramos una capacidad de atención ‘normales’. Para ello, dividimos las expectativas según la edad:
- 2 años: De 4 a 6 minutos.
- 4 años: de 8 a 12 minutos.
- 6 años: de 12 a 18 minutos.
- 8 años: de 16 a 24 minutos.
- 10 años: 20 a 30 minutos.
- 12 años: 24 a 36 minutos
- 14 años: 28 a 36 minutos.
- 16 años: 32 a 48 minutos.
Teniendo en cuenta estos grupos de edad no tiene sentido, por ejemplo, presionar a tu hijo de 4 años para que tenga una clase de 25 minutos sin descanso, ya que la edad del niño tiene mucho que ver con su concentración y su rendimiento.
“La atención de tu hijo está también muy condicionada por factores como el hambre, el cansancio, la cantidad de distracciones cercanas y el interés por la actividad en sí”, dice Alekseeva, que asegura que no se puede generalizar en este tema.
Sin embargo, si la atención de tu hijo es inferior a la media, merece la pena abordarlo, ya que puede ser el resultado de una enfermedad crónica, como el hipotiroidismo, o un síntoma de un problema de aprendizaje.
Cuando los adultos no pueden enfocarse en su trabajo/estudios o en cualquier otra actividad, normalmente se sugiere utilizar una de las técnicas de gestión del tiempo o cambiar de actividad (ir a dar un paseo, almorzar, tomar un descanso).
¿Cuáles son las mejores técnicas de concentración para los niños?
- El descanso siempre es una opción. Será más fácil terminar la gran tarea si la divides y le das un tiempo de descanso. Es muy recomendable utilizar la respuesta física total durante el descanso. El ejercicio físico es una gran manera de recargar el cerebro.
- Utilizar los fidgets para que se relajen. Los fidgets son productos que los niños pueden hacer girar en sus manos mientras se mantienen atentos en la tarea principal.
- Utilice un enfoque individual. Si crees que tu hijo tiene dificultades con los ejercicios de lectura, hazlos divertidos con la ayuda de variaciones vocales, acelerando el ritmo o reduciendo la velocidad. O pídale que lea con la voz del robot.
- La motivación es la clave. No dudes en animar a tu hijo a cumplir una tarea. Un niño que se siente abrumado, se frustra y se distrae rápidamente. Ayude a su hijo a averiguar cómo abordar la tarea que le intimida.
Señales de alarma para identificar problemas de concentración
Cuando un niño tiene falta de atención, hay que comparar su comportamiento con el de otros niños de su misma edad y sexo (no sólo con sus amigos o compañeros de clase). Y si este comportamiento difiere drásticamente y afecta a la vida familiar y escolar, es el momento de buscar el consejo de un profesional.
Los síntomas del trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) pueden clasificarse en 2 tipos de problemas de comportamiento
- hiperactividad e impulsividad
- dificultad para concentrarse y enfocar
Un niño no necesariamente posee esos dos tipos de problemas a la vez. Por ejemplo, un niño con TDAH tiene bajo nivel de atención y enfoque, pero no de hiperactividad o impulsividad. Esta forma de TDAH también se conoce como trastorno por déficit de atención (TDA). A veces, el TDA puede pasar desapercibido porque los síntomas pueden ser menos evidentes.
El TDAH se diagnostica con más frecuencia en los niños que en las niñas. Las niñas tienen más probabilidades de presentar sólo síntomas de falta de atención y son menos propensas a mostrar un comportamiento disruptivo que haga más evidentes los síntomas del TDAH. Esto significa que las niñas que tienen TDAH no siempre son diagnosticadas.
Los síntomas del TDAH en los niños suelen ser perceptibles antes de los seis años. Se presentan en más de una situación, en la vida familiar y en la vida escolar.
Los principales signos de falta de atención son:
- Distraerse fácilmente.
- Cometer errores por descuido, por ejemplo, en los deberes.
- Parecer olvidadizo o perder cosas.
- Ser incapaz de cumplir con las tareas que requieren mucho tiempo.
- Ser incapaz de escuchar o llevar a cabo instrucciones.
- Cambiar constantemente de actividad.
- Tener dificultades para organizar las tareas.
Mientras que los principales signos de falta de atención son:
- ser incapaz de permanecer sentado, especialmente en entornos tranquilos.
- Estar constantemente inquieto.
- Ser incapaz de centrarse en las tareas.
- Movimiento físico excesivo.
- Hablar demasiado.
- Ser incapaz de esperar su turno.
- Actuar sin pensar.
- Interrumpir las conversaciones.
- Poca o ninguna sensación de peligro.
Estos síntomas pueden causar problemas importantes en la vida del niño, como bajo rendimiento escolar, escasa interacción social con otros niños y adultos, y problemas de disciplina.
Por eso es tan importante reconocer los síntomas y buscar ayuda cualificada.
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